Está considerado uno de los felinos más amenazados del mundo y es
posiblemente uno de los más raros felinos de Sudamérica. También se
trata de uno de los felinos menos conocidos por su rareza.
Está en peligro de extinción debido a que el tamaño de la población
efectiva total tiene menos de 2500 ejemplares maduros, con tendencia al
declive debido a la pérdida de su presa base y de su hábitat, junto con
la persecución y la caza con el fin de usarlos en ceremonias
tradicionales.